Cambios del estilo de vida mejoran la fertilidad de mujeres obesas

(Reuters Health) - Aunque la obesidad reduce significativamente la capacidad femenina de concebir, adelgazar con dieta y ejercicio elevaría las posibilidades de embarazo, de acuerdo con una revisión de estudios publicados.

Los programas que promueven adelgazar mediante cambios del estilo de vida, en lugar de la cirugía bariátrica o los fármacos, son los más indicados y elevan las probabilidades de lograr un embarazo espontáneo, según publican los autores en Canadian Medical Association Journal.

"Las mujeres tienen que saber que pueden afectar su salud reproductiva si son obesas y deberían mejorar el estilo de vida", dijo el autor principal, doctor Jean-Patrice Baillargeon, de la Universidad de Sherbrooke, en Canadá.

La infertilidad, que es la incapacidad de quedar embarazada después de 12 meses de intentarlo, afecta al 15 por ciento de las parejas canadienses, de acuerdo con los autores, y al 12 por ciento de las estadounidenses, según estiman los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades con sede en Atlanta.

El 25 y el 19 por ciento de las canadienses en edad reproductiva tienen, respectivamente, sobrepeso y obesidad, es "prudente" determinar las mejores maneras de reducir el impacto en la fertilidad.

"La evidencia también demuestra que la obesidad en el embarazo eleva el riesgo de obesidad y diabetes infantil", indicó Baillargeon, que preside la Sociedad Canadiense de Endocrinología y Metabolismo.

Su equipo revisó los estudios publicados en los últimos 10 años sobre la relación entre la obesidad, la fertilidad, los cambios del estilo de vida y otras opciones terapéuticas. Analizó los datos de los 20 artículos más importantes.

Halló que el sobrepeso elevaba un 27 por ciento el riesgo de infertilidad, mientras que la obesidad lo hacía un 78 por ciento.

El equipo explica que la obesidad afecta la fertilidad femenina a través de los trastornos menstruales y ovulatorios, como el síndrome de ovario poliquístico. La posibilidad de concebir cae un 4 por ciento por cada punto más de índice de masa corporal (IMC). La obesidad, según agrega, también reduce la efectividad de los tratamientos de fertilidad.

Durante el embarazo, la obesidad eleva las posibilidades de tener diabetes gestacional, depresión posparto y parto por cesárea. Los recién nacidos de madres obesas son más propensos a la prematuridad y las malformaciones congénitas.

Organizaciones internacionales de salud recomiendan que las mujeres con obesidad adelgacen un 5 por ciento del peso si desean concebir o iniciar un tratamiento de fertilidad.

FUENTE: CMAJ, online 18 de junio del 2018